Jubileo de la Esperanza
El sábado 30 de agosto toda la Misión de Lengua Española peregrinamos a Baden a la Iglesia Jubilar Maria Himmelfahrt (Stadtkirche) para cumplir unos preceptos de la Iglesia, como lo es ganar Indulgencias por uno mismo o por un Alma del Purgatorio.
El propósito principal de un Año Santo o Jubilar, según el Catecismo de la Iglesia Católica, es la conversión personal y la penitencia, es decir, la renovación espiritual interior del individuo, pero también de la comunidad eclesiástica. Para motivar a los fieles, el Papa promulga disposiciones especiales para estos años jubilares con el fin de obtener las llamadas indulgencias jubilares. El papa Francisco escribió al respecto: «Todos los pecadores arrepentidos que, durante el Año Santo, purificados por el sacramento de la penitencia y fortalecidos por la sagrada comunión, recen según la intención del Papa, pueden obtener del tesoro de la Iglesia una indulgencia plenaria y, con ello, no solo el perdón de los pecados, sino también la remisión de las penas de los pecados».
Recordamos una vez más los requisitos para obtener las Indulgencias:
- Confesión sacramental (no es necesario haberse confesado ese mismo día. Quien se confiesa regularmente, por ejemplo, cada cuatro semanas, y no es consciente de haber cometido ningún pecado grave, siempre cumple este primer punto).
- Recibir la Sagrada Comunión.
- Rezar por las intenciones del Santo Padre (por ejemplo, el Credo, el Padrenuestro, el Ave María y el Gloria al Padre).
- Abandono interior completo del apego al pecado.
Normalmente solo se puede obtener una indulgencia plenaria al día, pero en el Año Santo es posible obtener una segunda indulgencia diaria si se tiene la oportunidad de comulgar por segunda vez. Sin embargo, esta segunda indulgencia debe dedicarse a los difuntos. Las indulgencias jubilares se pueden obtener si se visita una iglesia oficial de peregrinación en las condiciones mencionadas anteriormente. De este modo; con cada misa celebrada, por ejemplo, en la Iglesia Maria Himmelfahrt de Baden se puede obtener una indulgencia plenaria.

Comenzamos nuestra peregrinación en la Dreikönigskapelle de Baden.


y terminamos en la Stadtkirche de Baden Maria Himmelfahrt.



Con mucha alegría después de haber ganado Indulgencias nos tomamos la foto del recuerdo con nuestro Sacerdote, el Padre Juan José González.

Celebramos la Santa Misa junto con nuestra Madre Santísima la «Patrona de las Américas» la Virgen de Guadalupe.


Después de la Santa Misa disfrutamos de un rico apero preparado por nuestra Comunidad de Baden, a quien agradecemos con mucho cariño.









Agradecemos a toda nuestra Comunidad por haber participado de este evento tan especial.